Muchos de los que conocen a Sergio y lo ven tranquilo en la cotidianidad de su restaurante, podrían pensar que su vida siempre fue así, sin muchos sobresaltos y pocas dificultades.
Nada más alejado de la realidad, pero después de grandes dificultades, Sergio puede decir que tiene una vida algo tranquila y que su negocio está en el tope de lo que siempre creyó que podría alcanzar, En donde está hoy es el resultado de mucho trabajo, superación y tenacidad.
Durante la mayor parte del tiempo la vida de Sergio fue un constante explorar en diversas formas de hacer negocios, siempre buscó encontrar el camino correcto y el gusto pleno por lo que hacía.
Subió, bajó, cayó, tuvo infinidad de situaciones críticas y difíciles que le fueron construyendo como persona y como empresario.
En los primeros años de su llegada a este país encontró la posibilidad de aprender desde cero sobre la cocina Mexicana, comenzó lavando platos y escalando gracias a su constante inquietud por aprender y superarse.
Luego por aquellos movimientos de la vida cambió el trabajo en restaurantes y se aventuró en otros negocios. Emprendió, luchó, cayó de nuevo y se levantó. Por esa época era joven, inquieto y con un entorno que en muchas ocasiones lo llevó a caminos que no pensó encontrar.